Podria llegar a matar para obtener otra lamida de esa imagen dulce, echada en la cama, en un cuarto iluminado por velas, todavia con los anteojos negros puestos, sin poder pararte, buceando a pulmon por las oscuridades de la mente, limando los barrotes de la prision del cuerpo, dando rienda suelta a las emociones fuertes que te dominan y te dejan bailando en un paisaje de luna sobre las aguas que no te han tragado aun.
Estoy concentrando todo mi ser en esa fotografia que te tome. Con esa instantanea tuve tu alma en una hoja de cuaderno garabateada con pensamientos.
Puedo degustar un remedo de ese placer sentido que todo el tiempo corre y da vueltas escapando de la tristeza infinita, te tenia los aromas de la tarde con colores de otras epocas y la dulce caricia del viento en la mejilla y tu pelo que estaba mas negro que nunca y me daban ganas de comermelo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario