un fragmento del poema de T.S. Eliot, Los Salvajes Petrificados, I
el río está en nosotros, el mar alrededor
...
el aullido del mar y el ladrido del mar
son distintas voces
que cada tanto se oyen juntas:
el gemido de las caricias,
la amenaza y el beso de la ola
que rompe sobre el agua
la rompiente lejana sobre dientes de piedra
y la advertencia quejumbrosa
del promotorio que se acerca
son voces del mar
...
y bajo la opresión de una niebla silenciosa
la campana que suena
marcando una hora que no es nuestro tiempo
No hay comentarios:
Publicar un comentario